Nuestro colegio combina un modelo centrado en el aprendizaje del estudiante con un enfoque personalizado y basado en valores cristianos.
Nos aseguramos de que los niños adquieran todos los conocimientos necesarios para rendir los exámenes libres del MINEDUC, pero también desarrollen habilidades para la vida, como el trabajo en equipo, la resolución de problemas y la toma de decisiones.
Además, trabajamos en un ambiente de contención emocional y espiritual, donde cada niño es valorado y guiado con amor y respeto.
Nuestro programa está alineado con los estándares y objetivos de aprendizaje del MINEDUC. Utilizamos una metodología que asegura que los estudiantes dominen los contenidos requeridos para rendir los exámenes libres de 1° a 4° básico, al tiempo que desarrollan competencias prácticas y valores cristianos. Los niños reciben un acompañamiento continuo para asegurarse de que están preparados en todas las áreas, sin descuidar su crecimiento integral.
Nuestro enfoque se basa en principios cristianos sólidos, alineados a la Biblia. Estamos comprometidos en formar a los estudiantes no solo en lo académico, sino también en su carácter, inculcando valores como la honestidad, el respeto, la solidaridad y el amor al prójimo. Creemos que la educación va más allá del conocimiento, formando personas con principios éticos que los guiarán a lo largo de su vida.
Nos apoyamos en metodologías activas e innovadoras, como el Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP), el Aprendizaje Colaborativo y la Clase Invertida. Estas metodologías promueven que los estudiantes sean protagonistas de su propio aprendizaje, trabajando en equipo, investigando y aplicando lo que aprenden en situaciones reales. Esto no solo los prepara para los exámenes libres, sino también para enfrentar desafíos futuros.
Creemos en la importancia de un ambiente protegido, donde los niños se sientan seguros y valorados. Ofrecemos un entorno de contención emocional y espiritual, en el que los docentes acompañan de manera cercana el desarrollo de cada estudiante. Aquí los niños no solo aprenden conocimientos, sino que también encuentran un espacio para crecer emocionalmente y espiritualmente, en un ambiente respetuoso y acogedor.
Cada niño es único, por lo que nuestro enfoque es personalizado. Nos aseguramos de conocer las fortalezas, intereses y desafíos de cada estudiante, ofreciendo el apoyo necesario para que todos puedan alcanzar su máximo potencial. La diversidad de estrategias de enseñanza y de situaciones de aprendizaje garantiza el desarrollo de todos.
Nuestro modelo tiene un fuerte énfasis en el desarrollo de habilidades sociales, cognitivas y de resolución de problemas. Los niños aprenden a trabajar en equipo, a comunicarse de manera efectiva, a tomar decisiones informadas y a enfrentar desafíos con creatividad y confianza. Estas habilidades son esenciales no solo para sus estudios, sino para su vida futura como ciudadanos responsables y comprometidos.
Creemos que la educación es un esfuerzo compartido entre la escuela y la familia. Mantenemos una comunicación abierta con los apoderados, invitándolos a ser parte activa del proceso educativo de sus hijos. Organizamos reuniones periódicas y talleres para que las familias se sientan conectadas con el progreso y crecimiento de sus hijos en el colegio.
La fe está presente en todo lo que hacemos, desde el contenido de nuestras clases hasta el ambiente de respeto y amor que promovemos en la escuela. Desde allí, guiamos a los estudiantes a conocer los valores cristianos y a reflexionar sobre cómo aplicarlos en su vida diaria. Fomentamos el desarrollo espiritual de manera amable y respetuosa.
Sí, ofrecemos actividades complementarias que refuerzan el aprendizaje y fomentan el desarrollo integral de los niños. Estas actividades forman parte inseparable de cada jornada de clases y están integradas a nuestro currículo. Pueden incluir proyectos de servicio comunitario, talleres creativos y recreativos, siempre en línea con nuestros valores y objetivos educativos. Buscamos que cada niño encuentre espacios para explorar sus intereses y talentos.
El bienestar emocional es una prioridad en nuestro colegio. Contamos con un equipo docente y staff de colaboradores preparados para ofrecer apoyo emocional a los estudiantes, ayudándolos a enfrentar desafíos personales y académicos. Promovemos un ambiente de confianza donde los niños se sientan cómodos compartiendo sus preocupaciones y sentimientos, sabiendo que recibirán la orientación adecuada.
Contamos con un equipo docente altamente calificado, compuesto por una dupla co-docente integrada por una profesora de educación básica y una educadora diferencial, ambas capacitadas para atender las necesidades educativas de nuestros estudiantes. Además, disponemos de un staff de colaboradores multidisciplinar que incluye profesionales en áreas como psicología, pedagogía y orientación, garantizando un enfoque integral que atiende tanto el aprendizaje académico como el desarrollo emocional y social de los niños.